Galería de sitios y fotos dedicada a Arcos de la Frontera, pueblo blanco de la Sierra de Cádiz.

viernes, 22 de enero de 2016

Calduba




La ciudad romana de Calduba se localiza al sudeste del actual termino municipal de Arcos de la Frontera. Sierra Aznar es el nombre del relieve y también del yacimiento, pero este se sitúa en concreto en el Cerro del Moro, a una altura que oscila entre los 210 y los 400 metros de altura. De este modo, la situación del yacimiento es muy privilegiada, ya que domina gran parte del valle del río Majaceite.












Respecto a la denominación en época romana de la ciudad de Calduba, los datos se reducen a los aportados por Ptolomeo, que sirvieron para las investigaciones del erudito local Manuel Mancheño,   académico de la Historia y gran conocedor de las fuentes antiguas.



"... el pueblo que estuvo situado en la Sierra de Aznar, se llamó Calduba. ¿Se sabe dónde estuvo colocada la Calduba de Ptolomero? Pues si no se sabe y en la longitud y latitud geométrica que Ptolomeo le asignó existen unas ruinas conocidamente romanas. (...) hay que suponer lógicamente que aquellas ruinas son las de Calduba..."

Mancheño y Olivares, M.
1904:342-343.

















Por sus dimensiones, por sus estructuras constructivas conservadas, el asentamiento de Sierra Aznar adquiere desde nuestra concepción urbanística el presente calificativo de ciudad romana, independientemente, del carácter jurídico otorgado en dicho periodo histórico. Así mismo, el territorio de la ciudad, en donde se integra también el espacio de la necrópolis y las tierras de labor mas próximas, sobrepasa con mucho la unidad geomorfoligica del Cerro del Moro, si bien   el núcleo de población se centraba en la ladera oeste de dicho cerro.



















Los restos de estructuras romana ocupan todo el cerro, diferenciándose elementos hidráulico, muralla y viviendas. Se localizan murallas, bastionadas de más de dos metros de altura y un primer recinto amurallado atribuibles al Bronce Final. En época romana se amplió el recinto amurallado y se construyó un importante conjunto de cisternas para la captación de aguas destinadas a abastecer el acueducto que iba hasta Gades, sillares y abundante material cerámico en superficie.





















Junto al Patrimonio arqueológico Sierra Aznar se presenta con un extraordinario enclave natural, antesala de la Sierra de Grazalema. En la actualidad se conjugan los intereses patrimoniales con la explotación agrícola y ganadera del entorno.





El yacimiento se encuentra en las proximidades de la Barriada La Perdiz y es una excursión que merece la pena por si misma y por las características medioambientales del lugar.